miércoles, diciembre 4, 2024
El CINU

Para 2030, cerca de 3.000 millones vivirán en asentamientos superpoblados, alerta Guterres

Para satisfacer la demanda mundial, es necesario construir más de 96.000 viviendas cada día y esas viviendas deben ser parte de la transición verde, dijo el Secretario General en un mensaje con motivo del Día Mundial del Hábitat.

          “Cada año, el Día Mundial del Hábitat destaca el estado de las poblaciones y ciudades del mundo. La celebración de este año pone de relieve la importancia de la vivienda como factor del desarrollo urbano sostenible.

          En la actualidad, 1.000 millones de personas viven en asentamientos superpoblados y se alojan en viviendas inadecuadas. Para 2030, ese número aumentará a 1.600 millones. Es necesario adoptar medidas ahora para proporcionar a las familias de bajos ingresos y a las poblaciones vulnerables viviendas asequibles con seguridad de la tenencia y fácil acceso al agua, el saneamiento, el transporte y otros servicios básicos. Para satisfacer la demanda mundial, es necesario construir más de 96.000 viviendas cada día y esas viviendas deben ser parte de la transición verde.

          La urgencia de mejorar las condiciones de vida ha sido puesta de manifiesto por la COVID-19, que ha devastado la vida de millones de personas en las ciudades. El acceso al agua limpia y al saneamiento, junto con el distanciamiento social, son respuestas clave a la pandemia. Sin embargo, en los barrios marginales ha resultado difícil aplicar estas medidas. Esto supone un mayor riesgo de infección, no solo en los propios barrios marginales, sino en ciudades enteras, muchas de las cuales reciben en gran parte los servicios de trabajadores de bajos ingresos del sector informal que viven en asentamientos informales.

          En el Día Mundial del Hábitat, como parte de este Decenio de Acción crucial con miras a lograr los Objetivos de Desarrollo Sostenible, pido que se redoblen los esfuerzos destinados a promover las alianzas, las políticas en favor de los pobres y las reglamentaciones necesarias para mejorar la vivienda en las ciudades. Mientras nos esforzamos por superar la pandemia, hacer frente a las fragilidades y desigualdades que ha expuesto y combatir el cambio climático, ha llegado el momento de aprovechar el potencial transformador de la urbanización en beneficio de las personas y el planeta.”