para México, Cuba y República Dominicana
La fístula obstétrica es una de las lesiones más graves y trágicas que pueden ocurrir durante el parto. Se trata de un orificio entre el canal del parto y la vejiga o recto causado por la prolongación u obstrucción de un parto sin recibir tratamiento. Las mujeres con esta lesión suelen sufrir incontinencia y, a menudo, son marginadas por sus comunidades. Muchas de ellas viven con este problema durante años e incluso décadas porque no pueden costearse la operación.
Se estima que dos millones de mujeres en África Subsahariana, Asia, la región árabe, América Latina y el Caribe viven con esta lesión, y que cada año se producen entre 50.000 y 100.000 casos más en todo el mundo. La mayoría de los casos afectan a mujeres pobres que viven en culturas donde la situación socioeconómica y la autoestima de la mujer dependen casi por entero de su matrimonio y su capacidad para procrear.A pesar de estos datos alarmantes, la fístula se podría prevenir prácticamente en su totalidad; el hecho de que siga habiendo casos es un indicio de que los sistemas de salud no satisfacen las necesidades esenciales de la mujer.